Desde su creación lo han relacionado con trámites, entidades, servicios, hasta mercados y programas que no tienen nada en común. Que es el régimen subsidiado de salud o un subsidio para la tercera edad, algunas de las falsas creencias.
Aquí están los mitos que más han generado confusión y distorsionado el instrumento.
Es un servicio de salud
Algunas personas confunden el Sisbén con un sistema de salud o beneficios respecto a ella. No lo es. Es un sistema de información con el que el Departamento Nacional de Planeación (DNP) ordena a la población según su calidad de vida.
Se trata de un subsidio
Los datos que recoge la encuesta y que entran a la base de datos del Sisbén, tras su verificación, no implican en sí ningún tipo de subsidio. No obstante, el puntaje que obtienen los encuestados sí determina a cuáles programas del Estado pueden postularse.
Afecta el cambio de residencia
Algunos piensan que cambiar el lugar de residencia o hacerle mejoras a la vivienda implica perder los beneficios de los programas sociales. Pero eso no es cierto. Para el buen funcionamiento de la base de datos es deber del ciudadano actualizar la información.
Ser informal es una ventaja
Una de las mentiras más frecuentes entre la población es que pertenecer al sector informal le significa más prebendas por parte del Estado. Es una falsa creencia que ha generado confusión entre algunos trabajadores que evitan formalizarse por temor a perder beneficios de programas.
Más educación sube el puntaje
Quienes piensan que revelar el nivel educativo real pone en riesgo la permanencia en el Sisbén o le reduce ayudas y auxilios, están equivocados. Es indispensable que se diga la verdad, porque tarde o temprano, con el cruce de datos, se conocerá si hay engaño.
No se puede tener nevera
Algunos colombianos piensan que tener entre sus pertenencias licuadora, nevera o lavadora, entre otros electrodomésticos, afecta la permanencia en el Sisbén. Pero eso no influye. Las personas pueden progresar y seguir haciendo parte de la base de datos.
Si se tienen más hijos, mayor es el beneficio
Hay personas que creen que el Sisbén es un auxilio para la primera infancia o que entre más hijos se tenga, mayor opción hay para clasificar a los programas sociales del Estado. Eso no es cierto. El número de hijos no garantiza un puntaje bajo en la encuesta ni la clasificación a uno o más subsidios.
Régimen contributivo lleva a la exclusión
El colombiano que esté en la base de datos del Sisbén puede pasar al régimen contributivo sin que eso implique su salida del sistema de identificación. Sucede igual con la persona que era desempleada en el momento de la encuesta, pero luego consigue trabajo. Ninguna de esas acciones la excluye de la base de datos.
Solo sirve a unos colombianos
Es una idea equivocada creer que solo algunos sectores de la población pueden estar en el Sisbén. Cualquier colombiano puede solicitar la encuesta, para entrar al sistema, pero los subsidios y ayudas del Estado solo se dan a quien, por puntaje, es potencial.
Actualización de datos depende del Gobierno
La información del Sisbén es insumo para la focalización de los programas sociales que, a través de diferentes entidades, ofrece el Gobierno Nacional. Por esto, la responsabilidad de mantener la información actualizada es de los hogares y de las alcaldías municipales, que deben registrar esos cambios.
Cinco casos que han escandalizado por los engaños increíbles
Uno de los protagonistas de los escándalos por presunto uso irregular del Sisbén fue el concejal de Cajicá (Cundinamarca) Juan Ricardo Quintero, a quien se le descubrió en marzo del año pasado que tenía a uno de sus hijos en una universidad de Bogotá, gracias a la beca del programa Ser pilo paga, que beneficia a jóvenes de escasos recursos con cupo en instituciones de educación superior.
Para ingresar a este programa se necesita tener menos de 32 puntos en el Sisbén, y Quintero estaba entonces calificado con un puntaje de 28,33, pese a que –según reveló La W Radio– gana al año 47 millones de pesos y tiene una vivienda que vale 220 millones de pesos.
Otro caso que sorprendió al Departamento Nacional de Planeación se presentó en Medellín, donde una joven de 20 años, cuyo hogar está inscrito en el Sisbén, se hizo pasar por embarazada durante varios años, para mantener el puntaje bajo.
En La Jagua de Ibirico (Cesar), un señor ingresó al Sisbén en el 2009 y reportó que no tenía ingresos. Su puntaje quedó en 2,4 . Cuando se verificaron los datos de su ficha, se encontró que llevaba seis meses recibiendo ingresos mensuales por 6,4 millones de pesos.
En Cartagena, un adulto decidió alquilar su vivienda para que otras pudieran decir que vivían en un cuarto en arriendo, y así lograr bajos puntajes. Paradójicamente, cuando encuestaron al dueño del inmueble, este, en cambio, consiguió un mayor puntaje que los demás.
Una persona del Valle que vivía en EE. UU. alquiló como pobre en el país una casa en un barrio humilde para acceder al subsidio de salud. Sin embargo, se comprobó que nadie la conocía en el sitio que había arrendado.
EL TIEMPO
Fuente: www.eltiempo.com